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Desarrolladas como respuesta a las demandas de los clientes, los modelos C-VLR 62 y 122 enriquecen la ya amplia gama de bombas de vacío de garra Elmo Rietschle, que abarca desde 60 m3/h hasta 1000 m3/h.
Los intervalos y costes de mantenimiento son muy inferiores, ya que solo requieren cambios de aceite cada 20 000 horas, en lugar de las 5000 que suelen ser habituales en las bombas lubricadas. Su diseño innovador permite acceder fácilmente a la cámara de bombeo para agilizar el mantenimiento y reducir el tiempo de inactividad.
También incorporan menos piezas móviles que los modelos de la competencia, sin necesidad de fluidos sellantes ni lubricantes en la cámara de compresión. Se trata de un producto claramente muy ecológico. Estas ventajas se suman al extremadamente bajo coste de vida de las bombas de vacío y a la reducción de la huella de carbono.
